lunes, abril 28, 2008

Colaboraciones 2008 (The Bootleg Series Vol. 17)

Operación ‘truño’ I

Como cada semana, desde la tribuna, que graciosamente me ha cedido mi compañero, voy a hacer lo que mejor se me da. Esto no es otra cosa que despotricar, criticar y destruir lo que, desde mi punto de vista, es ofensivo y carece de fondo, interés, inteligencia o razón de ser. Es decir, aquí soy juez, verdugo y hago lo que me da la gana, cuando quiero y como quiero. Os diréis que menudos aires me doy, que se me ha subido a la cabeza el escribir unos mediocres artículos, que he perdido el norte; pues no, lo único que quiero hacer es justificar la longitud desmesurada de este artículo en base a que el tema lo merece y a la libertad de acción que poseo. El caso es que dada la autonomía que tengo no debería ni justificarme, pero en fin, esto es lo que hay y este escrito será publicado en dos tandas.

Que el tema de Operación Triunfo necesite una extensión especial no se debe a la profundidad o dificultad de su tratamiento, sino a la gran cantidad de elementos negativos que componen este programa; además de la evidente falta de talento artístico de los mediocres cantantes que pululan por este hediondo programa. No sé cómo han sido capaces de perpetrar tamaño atentado contra el telespectador y contra el sentido del espectáculo en general, no sé como el mundo de la música no se ha levantado en rebelión contra esta abominable producción. El caso es que el formato tiene éxito y funciona desde hace años, igual debería preguntarme si soy yo el bicho raro.

Empecemos por el principio, por quién perpetró este asunto. Pues nada menos que La Trinca, grupo musical catalán de cuyo ocaso mi generación fue testigo. Según cuentan, realizaban una crítica mordaz e inteligente a la situación política española, pudiendo burlar con su habilidad la censura franquista. Yo, realmente no fui testigo de esta supuesta época dorada, y los recuerdo como representantes de un humor grueso e infantil. El caso es que estos tipos, después de veinte años de carrera durante los que publicaron nada más y nada menos que treinta y ocho discos, se pasaron al otro lado; al reverse tenebroso, pasaron de hacer mierdas a producirlas y llenarse los bolsillos. En el año 1987 crean la productora Gestmusic, con la que cosechan éxitos a todos los niveles, incluyendo el celebérrimo Crónicas marcianas. Otro de sus éxitos más rotundos lo supuso Operación Triunfo, con esto terminaron de llenar sus arcas apelando al sentimentalismo fácil y a la falta de estilo evidente; no hay más que recordar la primera edición de este programa y su millonaria venta de discos. Yo os maldigo, integrantes de La Trinca.

Asunto a destacar es el de los presentadores. Del primero no recuerdo ni el nombre, sólo sé que era el típico guaperas con un ascenso meteórico. Sé que se llamaba no sé qué Lozano y que el único problema que tuvo fue que tardó menos en bajar que en subir al estrellato, supongo que ahora será yonqui o alcohólico, aunque con probabilidad ambas cosas a la vez. Ahora, creo que desde el año pasado, es el incombustible Jesús Vázquez el que lleva las riendas del programa. Preguntar por quién presenta en Telecinco es una tontería, ya sabemos que o será el citado maromo o el pobre Mario Picazo, ya que ambos mantienen una relación de vasallaje con la cadena privada. A pesar de su evidente explotación, parece que el señor Vázquez se encuentra en su salsa con los triunfitos, además tiene la oportunidad de cambiar constantemente de imagen; cosa que debe encantarle ya que nunca le veréis repetir estilo o aspecto. Es como una reinona con una cadencia terrible hacia el carnaval; lo mismo va de machote sin afeitar, que de adolescente, que de super-gay. En fin, éste no es de los que más me enervan, hay cosas peores en el maldito OT.

Tema aparte es el jurado, elemento en el que este año más se han centrado. Después de años de constante declive, durante los que la trayectoria de los concursantes era obviada cada vez más, ha surgido la figura definitiva para salvar un producto que cada vez olía más a rancio. Tuvo que llegar el odiado y amado Risto Mejide para salvar la vajilla. Este personaje, que levanta pasiones encontradas, es el verdadero agitador de las últimas ediciones de OT, si no hubiese sido por su descubrimiento haría tiempo que el programa hubiese descendido a las catacumbas de la televisión. ¿Fue descubrimiento o realmente fue una estrategia controlada? No olvidemos que Risto, antes de participar en este programa, era un avispado publicista que ya había trabajado en grandes campañas de marketing. Es decir, este no es más que un producto creado ad hoc para levantar la agotada audiencia. El caso es que la estrategia ha funcionado, el programa vuelve a carburar gracias a las constantes humillaciones a las que son sometidos los participantes. Realmente no me dan ninguna pena, en la mayor parte de los casos se trata de analfabetos sin ningún tipo de formación artística o cultural y, alguien, ya que en sus casas nadie les dice que no valen para el arte, tiene que darles la noticia de que son unos mediocres sin futuro ni talento. Esta misión recae en el personaje del que hablamos, ingrata para algunos, aunque parece que este tío disfruta del papel de malo que le ha tocado representar. No puedo evitar que despierte en mi cierta simpatía, aunque sea únicamente por el maltrato al que somete a la caterva de idiotas que pululan por OT.

Nacho Valdés (Metiendo caña).

13 comentarios:

Anónimo dijo...

querido verdugo, como sabes afilo mi catana en el mismo herrero, y propagar esta filosofia es parte de mi condicion, pero creo que el enemigo ha sido aniquilado dado que ellos han cavado su propia tumba.
No quedan titiriteros que convertir en famoso y Risto es el capitan de un barco hundido.
GDB
GDB

Nacho dijo...

Así me gusta, dándome la razón. Gracias, Gran Demonio Blanco, por compartir tus sabias opiniones con nosotros.

Anónimo dijo...

La verdad es que esto empieza a causar cierta adicción, uno dice los lunes por la mañana: "qué putada tener que volver al curro, pero a lo mejor encuentro un rato para ver a quien destroza hoy Nacho". No me has defraudado nada y, por lo que veo, aún tienes mas vitriolo en el bolígrafo.

No puedo evitar el sentir también cierta simpatia por Risto, salvando distancias viene a ser el equivalente a House y, de nuevo volviendo a salvar distancias...¿es a quien se quiere parecer Nacho el cronista?

Lo de las distancias, en tu caso, es porque lo tuyo es auténtico, no un personaje prefabricado y/o de ficción.

Dales, que me alegras el día...
Muchas gracias.

Anónimo dijo...

El tal risto no deja de ser un "producto" como el bien denomina a esos sujetos.

Anónimo dijo...

Maestro, hay una cosa en la que no te tengo que llevar la contraria. Risto como bien dice Willy es un "producto" y desde luego su funcion la lleva a cabo a la perfeccion. Se me ocurre una comparativa: La escobilla del WC es un producto con una funcion y el trabajo es sobresaliente en la gran mayoria de los casos, pero no puedo evitar sentir asco desde que hace su gran aparicion hasta que es destituida.
Risto, enhorbuena por tu trabajo, pero me das ASCO.
GDB

Nacho dijo...

Muy GDB, has captado la esencia del producto, el asco y la vergüenza ajena. A esto se dedica este personaje.

Anónimo dijo...

Operación Trunfo es, como dijeron los Mojinos, para aprender a coger el micro. ¿Qué creeis que puede salir de ahí?
Pero en fin, OT no es una pesadilla, si no una realidad; una nueva prueba de la degradada cultura occidental. como diría uno que yo me se.

Anónimo dijo...

A mi Risto es lo que más asco me da del programa porque ni siquiera se le ocurren los comentarios de forma espontánea, sino que los escribe antes o se los escriben, por lo que si te lo encuentras por la calle su rapided mental y verbal es 0, además odio su cara de pánfilo, para mí es un tonto a las tres. Enhorabuena por el artículo cariño.Un besete. Laura.

Anónimo dijo...

Creo que lo que dice Laura sobre que a Risto le preparan (o se prepara) los cortes, tiene todo el sentido del mundo.
Así que Risto también a la hoguera.
¡más madera!

Anónimo dijo...

Vaya, pues yo tambien vuelvo a las andadas por corazones hambrientos y efectivamente me encuentro con un nuevo desmembramiento televisivo del más alto nivel. Sin embargo al oirte hablar de La Trinca me han venido a la mente interesantes y claros recuerdos de como gozabamos en la infancia con sus creaciones, como escuchabamos una y otra vez los cassettes con sus refinados temas y nos partíamos de risa (historía aparte está el tema de como llegaban esas cintas a nuestras manos porque hablo de hace 20 años y no teníamos ni recursos ni conocimientos para hacernos con ellos. Querido Comandante, quizás podría darnos una explicación al respecto...como cambian las tendencias musicales). En fin, hay que decir que La Trinca, entre otras muchas cosas, también es responsable (directores/productores) de exitazos como 'No te rías que es peor'. Si bien hay que reconocer que sus productos no resisten bien el paso del tiempo (ni ninguna otra cosa) también hay que reconocerles que son pioneros en utilizar su 'humor grueso e infantil' para llenarse los bolsillos gracias al 'humor grueso e infantil' de todos los que le veían (que eramos muchos y en nuestro caso tenemos excusa pues a falta de gruesos no llegabamos a los 10 años). Como verás, al igual que tu, sacaban partido a los subproductos televisivos, cada uno a su manera... No renieges de los maestros!

Abrazos

Anónimo dijo...

Por alusiones:
No, si ya sabía yo que acabaría apareciendo el tema de "es que me educaron así".
No cuela, porque además de cintas de La Trinca, de Franco Battiato y de Tino Casal, también os intenté inculcar Urbanidad, Buenas Costumbres y Respeto a Los Mayores, y sin embargo es evidente que eso no caló mucho...

Ala, a joderse, cuando seais padres ya pondreis el CD que queráis (¿habrá CD en esa época?... porque se os está pasando el arroz).

Anónimo dijo...

Esta claro que OT es producto para estupidos sin sesos ni capacidad crítica, amantes de Bisbal Conchita, Pig Noise y esos imbéciles que, incomprensiblemente, venden. Sinembargo he de admitir que alguna vez he visto actuar al señor Mejide que cumple a la perfección su papel de malote y antisistema, pues si no fuese así nadie hablaria de él.

Sergio dijo...

Bueno amigos, poco o nada me queda por aportar a esta lapidación pública. Una vez más Don Nacho Valdés escribe lo que todos pensamos. Una vez más se confirma lo acertado de su fichaje por este (antes) humilde Blog y hoy lugar de referencia para no pocos animalitos curiosos en busca de verdades absolutas.
Tus palabras son las mías también compañero, aunque sin duda tu lírica es más sangrienta y perspicaz. Es algo que todos agradecemos.