viernes, noviembre 27, 2009

A Day in the Life


Hoy hubiese cumplido 67 años la magia bajo la yema de los dedos de Jimi Hendrix....
Seguimos roquenado Jimmi....

miércoles, noviembre 25, 2009

A Day in the Life


Hoy, hace 32 años actuaban juntos por última vez The Band. Aquel último recital fue grabado por Martín Scorsese en lo que se dice es el primer documental rock de la historia, "The Last Walz".
Mucho se dijo de tan caótica grabación. Entre las anécdotas más sonadas está la de "The White Room"; se trataba de una sala previa al escenario donde lo único que había era cocaína. Parece ser que Scorsese tuvo que limpiar digitalmente el bigote de Neil Young para la edición final de la película pues este iba cargadito de polvo blanco.
El concierto está repleto de colaboraciones de lujo como Dr. John, Dylan(the Band fue la banda que acompañó a Bob en los años fértiles y salvajes), Joni Mitchell, Ron Wood..... y un largo etcétera.
Con todo eso huelga decir que es un documento inevitable para todo aquel que en algún momento soñó con estar en la mejor banda de rock de todos ls tiempos.

lunes, noviembre 23, 2009

A Day in the Life

Sé que colgué un artículo suyo hace muy poco. Sin embargo, no podía dejar pasar este otro texto de Manrique.

No me llames Dj, por favor - Diego A. Manrique

En el ángulo muerto Vol. 37


Futuro

- Creo que eres la persona más adecuada para llevar los asuntos de tu padre. Tienes la formación y has trabajado con él, no veo el motivo por el que no puedes tomar las riendas del despacho. – Dijo Xavier mirando fijamente los ojos agotados de Raúl.
- No sé si estoy preparado.
- Tómate el tiempo que quieras, pero creo que la mejor terapia para superar todo por lo que has pasado es volver a recuperar el ritmo de tu vida.
- Ni tan siquiera he entrado en su piso, no sé en qué estado estará.
- Me he encargado de todo. No hay ni rastro de lo sucedido, pero si lo prefieres puedo hacer que trasladen sus cosas a otro lugar que te resultase menos angustioso.
- Sería lo más adecuado, esa casa me trae muy malos recuerdos.
- Entonces, ¿esto es un sí?
- Está bien. Me tomaré esta semana para ponerme al día y el próximo lunes comenzaré a trabajar. ¿Te parece?
- Por supuesto, creo que es una buena idea. Coge esto y disfruta unos días. – Xavier le entregó un pase para evitar el toque de queda y poder conseguir todos los productos sin necesidad de cartilla de racionamiento. – Esta es alguna de las ventajas de trabajar para el Estado. – Apuntilló.
- Muchas gracias, intentaré relajarme y olvidar la pesadilla que he vivido.
- Si necesitas algo o simplemente compañía solo tienes que llamarme. De hecho, este fin de semana voy a ir a disfrutar con mi familia de una casa de campo que tenemos. ¿Te apetece venir? Quizás te ayude a desconectar.
- Creo que no en esta ocasión, pero si cambio de opinión me pondré en contacto contigo.
- Como quieras. Por cierto, échale un ojo a esto. Empezaremos a trabajar sobre este asunto, supongo que es conveniente que por lo menos lo leas.- Xavier tiró sobre la mesa una abultada carpeta repleta de papeles.
- ¿De qué se trata?
- Es en referencia al juicio de los supervivientes de la revuelta. Tendremos que determinar qué pena pedimos como representantes del Estado, yo abogaría por la pena capital, sería lo más ejemplar y lo que nos evitaría complicaciones en el futuro. – La mirada de Raúl se volvió turbia durante un instante.
- Lo miraré, no te preocupes.
- Muy bien. Pues aquí te lo dejo. Hasta el lunes.
- Hasta el lunes.

Raúl se quedó en su sofá, leyendo los legajos que le habían entregado. Xavier se dirigió a la salida, donde esperaba el más pequeño de los secretas que se aplicaban en la tortura y hostigar a la ciudadanía. Oculto tras sus gafas de sol se puso a la altura de Xavier y bajó con él hacia la salida del edificio. Cuando ya habían salido al exterior afirmó: - No creí que fuese a aceptar.
- Sólo hay que saber que teclas tocar.
- Realmente el señor Zabala había servido bien, pero se estaba convirtiendo en una molestia en los últimos tiempos.
- Tienes razón, pero era difícil deshacerse de él sin provocar una fractura. No hay como una pequeña crisis para recuperar el pulso social, estaremos una buena temporada tranquilos, sin que a nadie se le ocurra protestar.
- Sí, la situación vuelve a estar donde queríamos.
- Exacto. Ya lo dijo el filósofo: No sirve de nada derrocar al príncipe para poner en su lugar al principio.
- Yo no lo hubiese expresado mejor.

Tras esta breve conversación se subieron al coche oficial y se alejaron hacia el palacio presidencial, las calles estaban desiertas, nadie se atrevía a salir.

Nacho Valdés

viernes, noviembre 20, 2009

A Day in the Life

Se cumplen treinta años del disco "London Calling" de The Clash. Tan importante aniversario es comentado por Diego A. Manrique en su artículo semanal con el diario El País

jueves, noviembre 19, 2009

Retratos (Vol. 4)

En su espalda podía leerse “Mis palabras poseen el fuego que no encontré en ti”. Sin embargo, hacía tiempo que de su boca no salían más que gruñidos y escupitajos. Cuando la noche caía nos dedicábamos a robar piezas de coche en la Gran Vía, para luego mucho más tarde comprarnos guitarras con ese pequeño sobresueldo. Intentábamos hacer canciones que detuviesen el tiempo por un instante pero lo único que acaba detenido era el cuerpo de alguno de nosotros en comisaría.
Al día siguiente nos poníamos nuestros mejores sombreros para ir a recibir a los carcelarios nocturnos. Dejábamos pasar el lunes de la manera más alejada de la realidad que fuera posible. Alguno se ponía recitar poemas haiku en medio del tráfico más brutal de la capital, otro compraba la mayor cantidad de comida basura imaginable y después la ofrecía a los congresistas a la salida del trabajo. Todos los días teníamos sol y amistad. Fue la mejor época del grupo. Ni siquiera pudo con nosotros aquel descontrolado huracán que arrasó el pueblo.
A pesar del ruido, las prisas, las calles de una sola dirección, los estanques secos, los perros abandonados, las lunas vacías queríamos seguir vivos. Tampoco pedíamos demasiado.

miércoles, noviembre 18, 2009

En el Backstage








Dibuja mi canción


El pasado sábado pasamos los Pastor-Lago una divertida noche en la ciudad de Madrid. Nos acercamos a la capital para asistir al concierto del maravilloso Kevin Johansen, acompañado esta vez por el singular dibujante Liniers.
El músico desgenarado (como el propio Kevin apuntó) y el dibujante degenerado (como también recalcó el artista) presentaban a la audiencia española el libro “OOPS”.
Una puesta en escena sorprendente nos recibió en la Casa de América. Kevin acompañado de sus guitarras y su barítona voz y al otro lado del escenario una mesa de trabajo con una cámara apuntando directamente a las cartulinas que sobre ella estaban. Una gran pantalla nos permitía ver lo mismo que al dibujante.
Fue así como cuando Johansen comenzó a cantar, el dibujante fue transformando las ingeniosas letras del argentino en brillantes dibujos. Todos asistíamos maravillados ante la muestra total de riesgo y talento.
El contacto con el público fue directo y emotivo. Tanto el músico como el dibujante no pararon de lanzarse chistes y bromas algunas de ellas desternillantes. Existía una complicidad asombrosa entre el trabajo de ambos, algo así como la música dibujada o los dibujos musicados dijeron en alguna parte del concierto. Johansen repasó gran parte de su repertorio en el que se puede comprobar la mezcla de culturas que le han hecho ser quién es. Aquel que esté interesado en su figura no tiene más que leer su biografía para intentar situar su hogar si es que puede, pues su música es inclasificable: Rock, blues andino, cumbia, tango, funky, música rusa, griega…..etc , todo lo toca el bueno de Kevin. Cuenta Liniers, el cual es un personaje increíblemente dotado para el humor, que la primera vez que escuchó a Kevin fue por la radio argentina, en concreto la canción “Mcguevara`s o Chedonal´s” (la cual es un canto a la globalización desde el humor más negro) y pensó “este tipo es un genio”. Después de eso se acercó a verle a un concierto y esperando ver a un un tipo alto, fuerte, rubio con toques suecos se encontró con un doble de Piojo López. Y es que si algo llama la atención de Johansen además de sus canciones es ese parecido físico con el Claudio.
Para el último tema del concierto se invitó a cantar a Jorge Drexler que andaba pululando por ahí. Fue una noche magnífica, por un lado por el sorprendente formato del concierto y por otro por ver que no hay nada mejor que ver sonreír a mi mujer.

Os dejo aquí un temita de Kevin :

martes, noviembre 17, 2009

A day in the Life




Hoy hace 10 años que nos dejó Enrique Urquijo. Pionero de muchos sonidos en España como el, ahora tan solicitado, country rock. Enrique siempre fue una figura emblemática y querida.
Desde aquí le recordamos con una de sus últimas canciones escrita para su hija María.


lunes, noviembre 16, 2009

En el ángulo muerto Vol. 36


Desencuentro

Cuando se abrió la puerta metálica le sorprendió la oscuridad en la que estaba sumida la habitación, la vista de Raúl tardó unos instantes en acostumbrarse a la penumbra. Comenzó a distinguir varias siluetas en una celda que se le antojó prácticamente medieval, perteneciente a una época que creía superada. De pie, con aire distraído estaba el agente que le había golpeado cuando fue torturado. En una de las esquinas, sentado sobre una banqueta desvencijada estaba el pequeño policía que dirigía la situación, en su expresión asomaba una sonrisa que a Raúl le pareció de superioridad, exhibía cierta satisfacción en su actitud, disfrutando del momento. En el suelo, hecha un guiñapo, estaba tirada Ana. La identificó al instante, de un vistazo fue capaz de reconocer su silueta descompuesta. Se quedó paralizado, a pesar de que le habían adelantado este instante no estaba preparado para lo que tenía delante. La joven tenía el cuerpo destrozado, estaba cubierta de sangre y heridas, ni tan siquiera tuvo capacidad para levantar la vista.
- Será mejor que os dejemos solos. Supongo que tendréis cosas de las que hablar. – Dijo Xavier mientras hacía un gesto para que los policías abandonasen la mazmorra.

Raúl se quedó un momento cavilando, sin saber qué hacer o decir. Dio un par de vueltas alrededor del cuerpo, intentando averiguar si Ana todavía respiraba o estaba sin vida. Se acercó a ella, le cogió la barbilla y le miró directamente a los ojos. Estaba despierta, esperando el momento de enfrentarse al que había sido su amante.
- ¿Estás bien? – Preguntó Raúl en un intento de comenzar la conversación.
- He estado mejor.
- Te advertí que esto sucedería.
- Es el coste que se paga por un sueño, estoy segura de que al final lograremos alcanzarlo.
- ¿A qué precio?
- Al que haga falta, hay intereses superiores a los de cualquier fin particular. – Raúl mudó su expresión, se volvió sombría.
- ¿Estás diciendo que todo en lo que me has metido lo tenías planeado?
- No exactamente.
- ¡Explícate! - Raúl profirió un grito, su paciencia estaba agotándose.
- Necesitaba acercarme a ti para, de esta manera, acercarme a los líderes.
- Pero, asesinaste a mi padre a sangre fría. Le conocías.
- Ya te he dicho que tenemos que dejar de lado nuestra sentimentalidad para lograr objetivos más altos, es lo primero que nos enseñan cuando entramos en el grupo.
- Sois una panda de lunáticos, sois pero que la secreta o cualquiera de las tácticas que utilizan los líderes para crear terror.
- No puedes compararnos, nuestros objetivos son claros y te aseguro que son compartidos por gran parte de la población, lo único que pasa es que la gente tiene miedo.
- Incluyen asesinar a ancianos, no me hagas reír. Lo que me dices es increíble, me has utilizado y has acabado con mi familia. Espero lo peor para ti, no busques mi ayuda porque no vas a encontrarla.
- No te necesito, acepto lo que me depare la revolución. Además, se necesitan mártires para concienciar a la gente, ya verás como los caídos servimos para despertar a los que están dormidos.
- Estás loca.

Raúl se dio la vuelta, comenzó a aporrear la puerta. – Abran. – Gritó.
Del otro lado esperaba Xavier con los dos agentes. – Yo me voy. ¿Puedo largarme ya a mi casa?
- Paciencia. Pronto podrás salir de aquí. – Respondió Xavier. - ¿Qué quieres que hagamos con ella?
- A mí como si le pegan un tiro en la cabeza. – Xavier hizo un gesto a los dos secuaces. – Ya habéis oído.
Entraron en la celda y a renglón seguido se escuchó un disparo, Raúl se estremeció de pies a cabeza. Nunca había sido partícipe de un crimen similar, a pesar del resentimiento que albergaba se descompuso anímicamente.
- Ella se lo había buscado. Le hubiese pasado de todas maneras.
- No quiero hablar del tema, ¿puedo ir a mi celda?
- Será mejor que vayamos a buscar tus cosas y que te escolten hasta tu casa. Tómate un par de días y ya hablaremos.

Raúl se alejó por el pasillo alumbrado por fluorescentes, en su cabeza únicamente se escuchaba el zumbido eléctrico de la iluminación y el eco del revólver que había disparado.

Nacho Valdés

jueves, noviembre 12, 2009

A day in the Life

  • - Aerosmith se queda sin voz y faro :


Steven Tyler ha anunciado a través de un comunicado oficial su deseo de labrarse una carrera en solitario o en compañía de otros. Tyler, según explica quiere dar campo a su propia marca y alejarla por completo de la emblemática banda que tanto le ha dado y quitado. Será curioso ver cómo se las apañan sin él.

  • - Juan Perro ofrece sus maquetas :





    El siempre inquieto Auserón regala desde su web http://www.lahuellasonora.es/ algunas de las maquetas de su esperadísimo nuevo disco. Un gran detalle en estos crueles tiempos de crisis.




    - Kevin Johansen y Liniers en España :

  • Buenísima noticia. El argentino universal Kevin Johansen dará tres conciertos en España (Madrid, Barcelona y Murcia) durante esta misma semana. Además estos conciertos servirán de presentación para el cómic que el mismo Johansen ha realizado ayudado por el fabuloso dibujante Liniers.



miércoles, noviembre 11, 2009

Retratos (Vol. 3)

Se pasó el día aspirando el humo que surgía de los agujeros que las balas habían dejado en los cristales, creo incluso que llego a colocarse. Después de eso, entró como un huracán en la tienda de repuestos y pidió: dos pulmones, un corazón de hierro y un cable con el que engancharse a la tierra y así poder respirar tranquilidad por unos minutos.
Cuando me lo encontré tirado en la puerta de su casa le di un puntapié, sobresaltado clavó su mirada en mí y dijo: “Estaba dormido. Soñando con una chica preciosa. La habría atrapado si no hubieses despertado”. Al instante, volvió a caer en un profundo sueño del que se despertó tres veces seguidas para acabar totalmente frito al final de día.

Aquella noche nos abandonamos sobre un suelo pintado con hojas secas y sexo pero la calma no hizo acto de presencia.
A la mañana siguiente, el viento arrasó con todo. Nos quedó el dolor de las jornadas de 12 horas y el susurro de las chicas de las agencias. Ellas siempre tuvieron tiempo para nosotros.

martes, noviembre 10, 2009

En el ángulo muerto Vol. 35


Ruta de certezas

Habían pasado varios días desde que Xavier encontró a Raúl colgado de una cadena, desde entonces había sido asistido médicamente, le habían trasladado a una celda individual y había podido asearse. Aunque anímicamente estaba destrozado, comenzaba a pensar con mayor claridad y esperaba las noticias referentes a la promesa de liberación. Los secretas que le habían torturado le vigilaban en ocasiones, comprobando que todo siguiese en orden. Lo que era evidente es que su actitud había cambiado diametralmente, ni tan siquiera le hablaban, únicamente pasaban y echaban un vistazo. A Raúl no le gustaban, sobre todo el pequeño agente que parecía, escondido bajo su sombrero y gabardina, manejar a su tremendo compañero. Él se dedicaba a dejar pasar el tiempo, le habían dejado algo de lectura y podía permitirse el lujo de matar el tiempo en su celda. Aunque se trataba de publicaciones estatales, ensalzadoras del régimen, le permitían tomar distancia con todo lo que había sucedido. Una mañana, después del aseo y el desayuno, le llevaron a una sala en la que le esperaba Xavier. Las paredes eran blancas y, como único mobiliario, había una mesa y dos sillas. Él le esperaba sentado, con su uniforme y condecoraciones lustrosas, según le vio entrar le invitó a sentarse.
- Parece que estás mucho mejor. ¿No es así?
- Sí, me encuentro más animado.
- Antes de nada me gustaría darte mis condolencias por la pérdida de tu padre, yo también he perdido a un amigo. Bueno, algo más, un mentor o alguien en quien fijarme.
- Muchas gracias.
- Me gustaría ayudarte a salir de aquí, pero necesitó un gesto por tu parte.
- Estoy dispuesto a hacer lo que sea, dime lo que deseas.
- Sabemos que tú no disparaste, pero necesito conocer tu grado implicación en este asunto tan delicado.
- Ya he contado todo lo que sé, que es bien poco. Me he visto mezclado en algo que no esperaba, que no comparto y para lo que no estaba preparado. Lo único que me gustaría es salir de aquí lo antes posible. – Aunque Raúl intentaba mantener la calma sus ojos se tornaron vidriosos.
- Para eso estoy yo aquí, para ayudarte a olvidar esto y puedas enterrar a tu padre. Antes necesito que me cuentes todo lo que sabes sobre esta organización con la que te has visto mezclado.

Raúl relató lo que le había sucedido en los últimos días, procuró no omitir ningún detalle, que nada quedase en el tintero para demostrar su disposición a colaborar. Ana salió a relucir en múltiples ocasiones, estaba realmente resentido y no ocultaría su disposición a entregar a su antigua compañera. Xavier escuchaba y tomaba notas de lo que consideraba importante, en todo momento mostraba una actitud paternalista y condescendiente para con el preso.
- En breve podré sacarte de aquí. Sabes que haré todo lo posible por ayudarte. ¿Necesitas algo?
- No te preocupes, estoy bien. Sólo quiero recuperar mi vida y que la justicia actúe contra los asesinos de mi padre.
- No te preocupes eso sucederá muy pronto.

Ambos salieron al pasillo donde esperaban los dos agentes de la policía secreta, les escoltaron a la celda donde Raúl había pasado los últimos días. Xavier le invitó a entrar y le abrazó antes de dejarle pasar, el gesto provocó que al reo se le humedeciesen los ojos. Antes de cerrar la puerta metálica Xavier se quedó en el umbral un instante.
- Tengo una sorpresa para ti. No quería decírtelo todavía pero no puedo esperar más.
- ¿De que se trata?
- Tenemos a Ana, cuando terminemos los interrogatorios podrás encontrarte con ella.

El portón se cerró provocando un estridente ruido metálico y dejando a Raúl sumido en la sorpresa.

Nacho Valdés

jueves, noviembre 05, 2009

A Day in the Life


Hoy hace 63 años veía la luz una de las figuras más relevantes de la música americana, Gram Parsons definió el sonido country alternativo antes que nadie. Años más tarde, Neil Young, Jeff Tweedy y algun otro camino por estos caminos abiertos por Parsons. El músico murió en el año 1973 dejando un legado envidiable tanto con sus bandas (The International Submarine Band, The Shilos, The Byrds y The Flying Burrito Brothers) como en solitario con discos esenciales (G.P. y Grievous Angel)

Siempre nos quedarán sus buenas canciones, que a fin de cuentas viene a ser la mejor manera de recordarle.

lunes, noviembre 02, 2009

En el ángulo muerto Vol. 34


Vuelta al camino

- Ya tenía ganas de volver a vernos las caras. – Raúl ni siquiera contestó.
- Eso es, mejor que no digas nada. Total, para lo que te va a servir.
El hombre minúsculo que había arrasado el apartamento de Raúl parecía divertido con la escena, llevaban horas encerrados en los sótanos del Ministerio cultural y ni tan siquiera se había quitado el sombrero y la gabardina, su cara estaba perlada por el esfuerzo. Observaba a Raúl oscilar de la cadena de la que colgaba, su robusto compañero estaba en mangas de camisa, golpeándole cada vez que su pequeño compinche daba la orden pertinente.
- Se te acusa nada más y nada menos que de asesinato, con el agravante de que la víctima era uno de los personajes notables que con su dedicación ayudó a levantar nuestra gloriosa nación. Además, cayendo en el parricidio. Me resulta repulsiva la manera en que actuáis los revolucionarios, no respetáis a nada ni nadie. ¡Vergonzoso!
El individuo se acercó con los ojos cargados de furia, soltó un puñetazo que Raúl casi ni sintió puesto que llevaba horas recibiendo golpes. Estaba hundido, destrozado física y moralmente. Lo habían encontrado llorando, abrazado al cuerpo sin vida del único familiar que le quedaba con vida. Nunca se hubiese imaginado que Ana sería capaz de llegar hasta el punto del asesinato y, a pesar de que conocía la importancia de su padre, no sabía lo imbricado que estaba en la organización estatal. Desde que la secreta le había detenido, todo había sido un devenir de sorpresas y revelaciones que nunca hubiese esperado descubrir.
- Nos vas a contar quién fue tu cómplice. Las pruebas demuestran que tú no fuiste el ejecutor, que otra persona disparó por ti. Si no nos lo cuentas cargarás tú solo con la acusación. – Raúl estaba cansado, llevaba un tiempo que no podría delimitar colgado de los brazos. Hizo un gesto sumiso y agachó la cabeza.
- ¿No sé si sabes que lo más probable es que se pida la pena capital por este delito?
- Soy abogado. – Contestó desganado.
El pequeño agente hizo un gesto para que la tortura continuase, su enorme secuaz comenzó a golpearle las espinillas con una porra metálica. Cada impacto provocaba un nuevo grito, ahogado y reprimido pero imposible de aguantar en su interior. La pesadilla estaba durando demasiado pero Raúl no estaba dispuesto a colaborar, su mente era un hervidero de contradicciones y lo único que tenía claro es que era él el que deseaba la venganza. Si salía con vida se encargaría de buscar a Ana, quería saber el porqué de su traición, el motivo por el que le había utilizado sin contemplaciones. Se sentía como un muñeco, un títere en manos de los distintos poderes. Tenía la sensación de que los acontecimientos que le habían llevado hasta donde estaba no habían sido fortuitos, como si de alguna forma le hubiesen empujado hasta la situación en la que se encontraba.
Se abrió la puerta, Raúl no tenía fuerzas para mirar quien había entrado. – Bajadlo de ahí. – Dijo el recién llegado con tono autoritario.
El timbre le resultó familiar, Raúl levantó la vista y vio a un hombre de uniforme que no pudo identificar al primer vistazo pues tenía los ojos hinchados por los golpes recibidos. El tipo se acercó a él y cariñosamente le acarició el pelo, se trataba de Xavier, que había sido amigo de su padre desde que él tenía recuerdo. Había forjado una carrera en el ejército que le había aupado hasta las más altas esferas, su prestigio era enorme y los hombres que hasta hace un momento estaban torturándole se retiraron a un rincón.
- Ya ha terminado todo. Yo te ayudaré a salir de aquí.
- Gracias. – Fue lo único que pudo contestar, sus ojos se cerraron de puro agotamiento. Se quedó dormido en el regazo de Xavier, como si fuese un niño que no aguanta más despierto.

Nacho Valdés