Black Power
Mavis Staples (Chicago, 1940) llegó el pasado sábado, como un huracán, para cerrar el Festival de Jazz del Palau de la Música de Valencia. La cantante, bandera del sonido Staxx, supo en su momento llevar a las vaquitas que pastaban en los montes del góspel y la lírica religiosa hacia prados más íntimos, cercanos y populares. No tuvo miedo, ni pudor a la hora de atravesar puertas antes cerradas para mujeres como ella.
Llegó acompañada por una excelente banda (el guitarrista Rick Holmstrom, el batería Stephen Hodges, el bajo Jeff Turmes, y un coro integrado por Yvonne Staples, Donny Gerrard y Vicki Randle)y fue desgranando su arsenal de canciones junto con versiones de grandes clásicos de la música americana.
Abrió el concierto con una clase magistral sobre espirituales a capela. Un brillante comienzo que no hacía sino esbozar el magnífico catálogo de joyas que íbamos poder contemplar esa noche. Mavis, de 71 años, canta con una juventud envidiable y con un dominio del tiempo y del fraseo extintos en los cantantes actuales. El primer regalo de verdad llegó con una versión del superclásico The Weight de la superlativa banda Canadiense The Band. Una emocionada y parlanchina Staples nombró a cada uno de los integrantes de la banda de country-folk al acabar la interpretación. El siguiente aludido fue Jeff Tweedy (Wilco) que ha producido, grabado y compuesto las canciones del último disco de la de Chicago. Según contó Mavis, gracias a temas como You are not alone, que da título al disco, ha logrado este año un Grammy en la categoría de “Americana”. Precisamente fue esa la siguiente canción del concierto. El público, acomodado en las butacas (que no se inventaron para ver rocanrol) seguía entusiasmado con la total entrega de la cantante y sus músicos. Todos son destacables. Desde el reloj suizo que llevan en la batería hasta el corista (extraña palabra para definir a un hombre) Donny Gerrard que no tiene nada que envidiar a la Staples en cuanto a poderío y diabluras vocales. La base sólida y templada de Jeff Turnes y su enorme bajo (léase instrumento musical) salidos ambos de la película El Funeral de Abel Ferrara. Y por último, la sideral guitarra de Rick Holmstrom, que no deja espacio al aburrimiento y pone toda su notable técnica al servicio del arte de hacer canciones. Mavis Staples, que lleva en esto del “cante” desde el año 1951, atesora los poderes de una diosa sobre el escenario y así lo demostró recreando el clásico I´m loosing you, que a su vez grabó el padre Roebuck Staples a principios de los sesenta. Durante un breve descanso de la cantante, la banda interpretó algunas piezas musicales de forma brillante e inspirada mientras la Staples les vitoreaba desde atrás del escenario.
Volvió la de Chicago a rematar la faena con las fantásticas Too close/on my to heaven y I belong to the band, en las cuales contemplamos la verdadera categoría del los coristas y sobre todo de Donny Gerrard. Aparecerían una vez más en el escenario para una última interpretación que consiguió al fin levantar al público de sus asientos. El Palau no es lugar para una banda así.
En resumen, fue una magnífica noche en la que pudimos constatar que Mavis canta cada día mejor y que, por lo que parece, tiene cuerda para rato. Así que, como diría ella misma, “¡Halleluja!”.
4 comentarios:
Excelente crítica inspirada por toda una reinona del Soul más negroide y americanote. Debo reconocer que me muero de envidia, tenía que haber dejado a mi hermano tirado en su boda para asistir a este concierto.
La próxima vez ya sé cuáles deben ser las prioridades vitales: primero la música y después todo lo demás.
Abrazos y enhorabuena por la crónica.
bufff, me ha molado mucho. La próxima vez que esta señorita de cuerpo esbelto nos visite me avisas.
Hay poca gente que me sorprenda...y tu lo haces cada dia.
Excelente e inmejorable cronica.
Mavis me da un beso de buenas noches todos los dias... Aleluuuuya!
Besos y abrazos.
Oh I Wish...I wish you were here...
AL próximo os aviso a tod@s...
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