miércoles, diciembre 05, 2012

Delaletra



El club de los 27




La actitud romántica que reinaba en la España de la primera mitad del XIX fue llevada hasta sus límites más extremos por Mariano José de Larra cuando se pegó un tiro en la cabeza, un disparo que rezumaba el desamor y la frustración que tuvo que afrontar y que fue incapaz de superar.
Aunque este autor destacó en varios campos literarios, sería como articulista como alcanzaría las más altas cotas de su expresividad y cómo se granjearía un hueco en el firmamento lírico más prestigioso. Sus artículos de costumbres resultan, además de actuales doscientos años después, reconocibles para cualquiera que haya estado en Madrid y haya disfrutado de esa ciudad. Tascas, estrenos teatrales y personajes cotidianos son retratados con agudeza y resultan creíbles a pesar del tiempo transcurrido desde la publicación de sus escritos. Lo más interesante, por lo menos desde mi punto de vista, es el tono mordaz que utilizaba el joven escritor y que hace de su lectura una grata experiencia capaz de robar más de una sonrisa. Es por esta ironía por la que durante su vida periodística utilizó distintos pseudónimos como Figaro, el Pobrecito hablador y otros que no recuerdo aunque sean todos ellos conducentes al periodista que abrió las puertas de la contemporaneidad al género articulista.
En definitiva, una lectura recomendable por su humor, por su cercanía y por la posibilidad de enfrentarse a ella de forma fragmentada puesto que esta compuesta por breves artículos.

2 comentarios:

Sergio dijo...

Soy muy fan de Larra y de sus artículos.
Realmente siguen teniendo un peso importantísimo además de una vigencia a prueba de bombas.

Me quedo con la recomendación...

cristina dijo...

Excelente recomendación de lectura obligada...siempre me gustó la sátira de los románticos