lunes, noviembre 03, 2008

Confesiones del Comandante Stratocaster vol. 5

Loli

-Ven, vamos a tomar el aire –dijo ella mientras le tiraba de la mano.

Él se dejó llevar sin decir nada, un poco confuso porque ya no dominaba la situación. Salieron del salón donde el resto del grupo reía y bailaba, entraron en lo que debía ser la habitación de los padres de Jesús, el organizador del guateque, y se asomaron al balcón. Era septiembre.

Estuvieron allí un rato, a oscuras, sin decir nada, sin soltarse la mano.

-Hace frío ¿volvemos para adentro? –dijo Loli.

Él asintió, pero con la sensación de que algo estaba fallando. No era así como tenían que ocurrir las cosas, pero no tenía referencias. Nunca le había ocurrido. Demasiado para 14 años de 1966.

Volvieron sobre sus pasos pero antes de llegar a la puerta ella se dio la vuelta y buscó su boca. Él, sorprendido, finalmente entendió… y se dejó llevar.

Allá al fondo se oía en el tocadiscos “Un sorbito de champán” de Los Brincos.

3 comentarios:

Nacho dijo...

Bonita historia que todos, de alguna manera, hemos vivido en algún momento de nuestra vida.

Otra apreciación, por lo que veo se llevaban los temas lentos para intentar hacer el ataque cobra con las pibitas. Aunque en esta ocasión parece que lo sufriste tú más que llevar la iniciativa.

Enhorabuena por la continuación de tu olvidada sección.

Nacho dijo...

Bonita historia que todos, de alguna manera, hemos vivido en algún momento de nuestra vida.

Otra apreciación, por lo que veo se llevaban los temas lentos para intentar hacer el ataque cobra con las pibitas. Aunque en esta ocasión parece que lo sufriste tú más que llevar la iniciativa.

Enhorabuena por la continuación de tu olvidada sección.

Sergio dijo...

Bonito comienzo para una nueva etapa dentro del Blog. Intuyo el riesgo y la inspiración.
Todos los mundos caben en una sola canción.
Bienvenido al fin.