jueves, septiembre 09, 2010

Retratos (Vol. 13)

…¿Qué más quieres que te diga sobre ello? Aquel tipo reventó la cabeza de su mujer con la misma indiferencia con la que quitas la cascara a un huevo antes de comértelo. Más tarde, llegó a decir que una voz interior le había recomendado viajar solo hasta la montaña para encontrase a sí mismo.
Y, tras darle muchas vueltas, he llegado a esa misma conclusión y es que esa es la autentica verdad: todos queremos estar solos y hay muchas maneras de hacerlo y seguramente todas validas. Sin embargo lo que no puedes, ni debes hacer es interpretar que mi soledad evita la tuya o que mi ubicuidad te resta lugares donde descansar; porque en esos casos, es posible que te encuentres con una pistola apuntando a tu cabeza exigiéndote algún tipo de precio o pago del que tú no has oído hablar jamás y que tiene que ver con aquel negro que negó el asiento a un blanco en el autobús antes de que todo empezase a cambiar. Ese es el momento en el que tendrás que decidir algo en tu vida por primera vez y lo más importante de todo es que: elijas lo que elijas serás libre por fin; pues una vez se hacen tratos con la muerte, todo lo demás es posible.
Mi hermano me dijo en una ocasión que la vez que más cerca se ha sentido de la muerte fue una madrugada en la que terminó rodeado de guionistas de telenovelas tras una larga noche de copas. Con esto te quiero decir que la parca es a veces una señorita muy caprichosa y que afecta a cualquier persona, estés muy arriba o muy abajo en el fango siempre tienes la posibilidad de terminar herido. Y es que la muerte y la soledad se parecen demasiado a esa habitación de tu casa que tiene una puerta atrancada y que no visitas demasiado pero que cuando lo haces sabes que pasarás allí mucho tiempo pensando en cómo has llegado tú a esa situación extrema…

3 comentarios:

Nacho dijo...

El regreso de esta sección vuelve con la maestría habitual.
Muy bueno y con toques filosóficos,me ha gustado muchísimo.

Abrazos.

Sergio dijo...

Gracias man. Tu opinión siempre tiene peso para mi.

Nos vemos

laura dijo...

Me han gustado mucho tus reflexiones!